Resumen. A partir de un ejercicio de recopilación, incluido en este trabajo a manera de entrevista, se plantea que el chiste —por encima de las consideraciones que lo asimilan a una forma narrativa milenaria (el caso o el cuento jocoso), o bien a un paradigma hermenéutico cuya formulación básica es un entimema— puede considerarse a partir del frecuente procedimiento que consiste en el despliegue dialéctico de la situación enunciativa, pues en innumerables situaciones el diálogo ocurre o se sostiene gracias a la incorporación de chistes y, en muchos otros casos, el chiste mismo configura la puesta en escena de una situación dialogada; se puede aventurar así que en tales momentos opera una verdadera dialéctica del chiste e, incluso, podría hablarse del chiste como un género eminentemente dialógico que tiende hacia una puesta en abismo del diálogo en términos bajtinianos.